martes, 14 de septiembre de 2010

La oracion....

¿CUÁN a menudo ora usted? ¿Le parece a usted que sus oraciones son oídas? ¿Se siente usted indeciso en cuanto a cómo orar o por qué cosas orar?

La oración es una provisión sumamente valiosa del Creador, un don verdadero que ha de tenerse en alta estima. Por lo tanto uno debe dar atención cuidadosa para valerse de este don y para que sus oraciones sean de tal índole que Dios las conteste.


El principal requisito de las oraciones que agradan a Dios y reciben su atención es muy sencillo... un corazón honrado ...y.. Junto con un corazón honrado hay otros requisitos importantes. La persona que ora debe tener fe en Dios. Esta fe es más que una creencia en que Dios existe, que es el Creador y es Todopoderoso. Dios dice en su Palabra inspirada: “El que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que viene a ser remunerador de los que le buscan encarecidamente.”—Heb. 11:6.

El apóstol Pablo escribe: “Acerquémonos con corazón sincero en la plena seguridad de fe.” (Heb. 10:22) Quizás el lenguaje que uno use sea sumamente refinado, o quizás carezca de pulimento, la expresión sea hecha con claridad o esté pobremente fraseada. Pero Jehová pasa por alto estas cosas externas y mira el corazón. “Él está enterado de los secretos del corazón.” No es la apariencia o la fraseología lo que vale con él, porque “en cuanto a Jehová, él ve lo que es el corazón.”—Sal. 44:21; 1 Sam. 16:7
De hecho, quizás la oración no sea audible en absoluto; puede que sea simplemente una fuerte súplica a Jehová desde el corazón, como en el caso de la fiel Ana. “Ella estaba hablando en su corazón; solo sus labios temblaban, y no se oía su voz.” Pero Jehová contestó su oración.—1 Sam. 1:13, 20.

Por lo tanto, si usted es una persona desanimada, afligida, sin verdadera esperanza, ¿qué puede hacer? Busque a Jehová Dios en oracion.. Humíllese e invóquelo por medio de Jesucristo. Él lo recompensará a usted dirigiéndolo a una verdadera esperanza de vida bajo el gobierno del Reino de Cristo, cuando “la tierra ciertamente estará llena del conocimiento de Jehová como las aguas están cubriendo el mismísimo mar.”—Isa. 11:9.




 

GRACIAS

GRACIAS